Lo que en principio parecía ser un país totalmente libre de gluten, resulta que iba a ser uno de los destinos que más problemas nos plantearía, ya que no solo la salsa de soja contiene gluten (y se la ponen a casi todo), sino el vinagre de arroz que utilizan en los restaurantes de sushi. Y nosotras que pensábamos ponernos hasta arriba de sushi, quien nos iba a decir que no podríamos comer arroz con pescado crudo por contener gluten.
Por suerte, encontré un grupo de facebook de extranjeros celiacos en Japón donde poder compartir sitios y productos libres de gluten, en inglés, eso sí.
Algunos blogs de celiacos que habían viajado al país del sol naciente también nos iban dando algunas pistas sobre qué comer.
Incluso han creado una web para poder recopilar los restaurantes y tiendas donde te facilitan comer sin gluten https://glutenfree-restaurant.com. Lamentablemente muchos sitios cierran tan rápido como se abren y aunque lleves la dirección una vez allí ya no existe y has perdido el tiempo dando vueltas. Comprobar siempre que aún existe el local cuando realicéis vuestro viaje.
En Japón no hay muchos casos de celiaquía, por lo que no tienen mucha información al respecto y no controlan la contaminación cruzada. He llegado a leer casos en los que les decían que les podían poner fideos de arroz, pero se los cocinaban en el mismo sitio que los de trigo. Mucho cuidado con esto.
Recientemente, están abriendo muchos sitios en los que indican que son sin gluten, pero resulta que utilizan miso o salsa de soja, por lo que aunque veamos que pone sin gluten, hay que asegurarse primero de que entienden bien el significado de una comida sin gluten.
La conclusión a la que llegamos es que era imposible comer en restaurantes, ya que una contaminación nos arruinaría el viaje. Solo podríamos comer en los realmente aptos, que lamentablemente eran solo dos en el primer viaje que hicimos. Por suerte, estos últimos años han ido aumentando los locales con opciones sin gluten y sin lácteos.